NESPEREIRA, parroquia de San Cibrao de
Feligresía del Camino Francés en el municipio de Portomarín, provincia de Lugo. Está situada entre las parroquias de Santa María de Castromaior, al sur, San Mamede do Río, al suroeste, Santa María de Ferreira de Pallares, al norte, San Pedro de Vilaxuste, al noreste, San Xulián de Caborrecelle, al este y Santa María de Gonzar, al sudeste. Comprende cinco entidades de población: O Alto do Hospital, situada sobre el trazado actual del Camino y, además, Camporredondo, Nespereira, As Peniñas y A Volta de Varela. Su población era de treinta y dos habitantes en 2019.
Con alguna relevante elevación rozando los setecientos metros de altura, sus arroyos desaguan en el río Ferreira, afluente del río Miño. La población empleada en los servicios es dominante.
Historia
La villa y el coto de Nespereira fueron donadas al monasterio de Ferreira de Pallares por el rey Alfonso IX en el año 1209. Esta donación fue confirmada por Alfonso XI en 1342.
En 1268 el rey Alfonso X sentenció en la concordia a la que llegaron los moradores de las feligresías de San Salvador de Vilaxuste, San Cibrao de Nespereira y San Salvador de Guntín con el abad y el convento de Ferreira de Pallares por razón del pago de diversos impuestos y tributos, quedando obligado el abad a defender a dichos moradores de los “comenderos y herederos” para que no les hicieran “tuerto ni fuerza”. La sentencia fue confirma en 1336 por Alfonso XI y por Pedro I en 1353.
En un traslado notarial del año 1563 se detallan los bienes y haciendas que los benedictinos del monasterio de Samos tenían en Nespereira, tras haber anexionado el monasterio de Ferreira de Pallares convirtiéndolo en priorato suyo.
Según Losada y Seijas en el Libro de encabezados de las derechuras de Ferreira de Pallares -del año 1739- se dice que la parroquia de Nespereira deslindaba “por el Sur con el Camino Francés y Hospital de la Cruz, por entre las casas y la ermita de San Esteban”.
En 1752 se afirma en el Catastro del Marqués de la Ensenada que la feligresía de “Santa Cruz de Nespereira” era señorío del “Real Monasterio de San Julián de Samos” que nombraba juez que conocía en lo civil y criminal y éste -a su vez- nombraba un teniente. Por razón de señorío se pagaba al monasterio el derecho de luctuosa, que consistía en la mejor res que quedaba a la muerte de cada cabo de casa. Los diezmos de todo género que se cobraban en el término parroquial ascendían a 500 reales de vellón anuales que percibía enteramente el cura párroco. Cada vecino pagaba a la fábrica de la iglesia dos ferrados de centeno por razón de primicia, que sumaban 18 reales de vellón al año y por razón del voto daba a la iglesia del apóstol Santiago un cuarto de ferrado de centeno, que sumaban 10 reales. En total estaban censados 12 vecinos, entre los que había un zapatero, que también era labrador. Las casas habitables eran 17, sin que existiese taberna, mesón u hospital alguno. Funcionaban tres molinos harineros de agua corriente; dos de ellos trabajaban todo el año y el otro solo la mitad de ese tiempo; había además, 57 colmenas.
En la relación de los beneficios parroquiales contenida en el libro titulado Razón Universal de todas las piezas eclesiásticas de este obispado de Lugo. Año 1755, que se guarda en el Archivo Diocesano, figura en el arciprestazgo de Ferreira-Ferreirúa la feligresía de “San Cipriano de Nespereira”, aneja de “San Julián de Cavorecelle”, de tres voces y el monasterio de Samos.
En 1827 Sebastián Miñano anota en su Diccionario que esta feligresía era de la provincia y obispado de Lugo, jurisdicción de Ferreira de Pallares. Tenía por entonces 26 vecinos y 128 habitantes en la aldea de “Ventas de Narón”. Contribuía con 837 reales y 18 “maravedises”.
Pocos años después, concretamente en 1849, dice Pascual Madoz que la feligresía de Nespereira, en el ayuntamiento de Portomarín, pertenecía por entonces al partido judicial de Chantada comprendiendo los lugares de “Nespereira y Ventas de Narón”, con 20 casas y una población de 22 vecinos y 131 almas. La iglesia parroquial era aneja de “San Julián de Caborecelle”.
En los años treinta del siglo XX, dice Amor Meilán que la parroquia de “San Ciprián de Nespereira” era filial de Santa María de Gonzar; le pertenecían los lugares de “Campo Redondo, La iglesia, Nespeiera, Peniñas y Ventas”.
Figura en la Gran Enciclopedia Gallega que en los años setenta del siglo XX esta feligresía tenía 84 habitantes en las entidades de Camporredondo, Nespereira y A Volta de Varela.
Fuentes y bibliografía
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