VITIRIZ, parroquia de San Vicente de
Parroquia del Camino Francés en el municipio de Melide, provincia da Coruña. Está situada entre las feligresías de San Mamede do Barreiro, al sureste y Santiago de Boente, al suroeste. Consta de tres entidades de población: Valadás, A Pena y Rocamador, ninguna jacobea
De pequeña superficie, nace en su término el Rego de Valverde, subafluente del río Ulla. Tenía 38 habitantes censados en 2019. Predomina la población dedicada en las actividades agrarias.
Historia
La parroquia de “San Vicenço de Vitiris”, también nombrada de “Nuestra Señora de Rocamador”, fue cuando menos en la Edad Moderna del arcedianato de Abeancos, obispado de Lugo, cobrándose en el término las rentas y pensiones correspondientes a la dignidad de dicho arcedianato.
En la visita que Vázquez de Gayo, arcediano de Abeancos, hizo a esta feligresía en 1561 halló que el tercio de la con cura del derecho de presentación estaba en manos de Leonor de Novoa y de los hijos de Lope Conde y de Bernal Colmelo.
De Lope Conde nos dice Taboada Roca que fue el primero de su linaje que a finales del siglo XV vino a vivir en Melide, contrayendo matrimonio con Leonor Pérez das Seixas, dueña del coto de “Hérmora” y descendiente de la familia poseedora de la torre de San Paio de Narla; tuvieron por hijos a García Conde, O Vello, y a Arias Conde de Ulloa, este último casado con Inés Vázquez de Camba, quien en su testamento fechado en 1567 dejó dispuesto que se diesen a “a nuestra señora de rrocamador seis rreales” que le debía.
Así mismo en 1570 consta que Jorge Varela de Dubra, señor de Quindimil y de la casa de Corvelle y alcaide de la fortaleza del Pambre (emparentado con la anterior familia por matrimonio de su hija), dejó una manda testamentaria de cien maravedís “a la señora de Rocamador”. El hijo de éste, Pedro Varela de Dubra, testó en el año 1613 dejando encargadas dos misas “en la iglesia de nuestra señora de rocamador”.
Señala López Valcárcel que en el expediente de provisión de la parroquia de “Sancibrao” fechado en 1660, se halla un documento expedido por el obispo de Lugo en 1610, en el que se confirma la resolución que acuerda unir los beneficios curados de “San Juan de Sancibrao” y su anejo de “San Vicente de Guitiriz” con el de Santa María de Malos. En el mismo expediente el presentero laico por Vitiriz dice que esta parroquia se llamaba también por otro nombre, que era el de “Nuestra Señora de Rocamador”.
En 1753 se dice en el Catastro de Ensenada que las feligresías de “San Mamed do Barreiro”, “San Vicente de Bitiris” y “Santiago do Seijo” componían parte de la jurisdicción de Boente, del conde de Altamira, que por razón de vasallaje cobraba en el término 1 real y 17 maravedís de vellón al año de cada vecino de estas tres feligresías y 2 reales de las viudas, a excepción de siete vecinos do Barreiro y otros 5 de Vitiriz que no contribuían por esta razón. Al mismo conde correspondía el derecho de luctuosa, que se regulaba por quinquenios y se estimaba que venían a ser 16 reales anuales en O Barreiro y 8 en Vitiriz. Los diezmos de todos los frutos que se producían en O Barreiro se repartían entre el cura párroco, el conde de Monterrey y el convento de Santo Espíritu de Melide. En la misma feligresía cada vecino que tenía yunta de ganado pagaba por razón del voto del Apóstol medio ferrado de centeno al año. En Vitiriz los diezmos se repartían entre el cura párroco y María Pita, viuda y vecina de “Santa Eulalia de Agros”. Por razón del voto al Apóstol se entregaba en esta última feligresía lo mismo que en O Barreiro. Por entonces había en O Barreiro 18 vecinos y en Vitiriz 12, registrándose en el primer término un eclesiástico, un arriero de vino con cinco caballerías y dos jaboneros, mientras que en Vitiriz había un escribano real, un soldado miliciano, un carpintero que también era labrador y dos jaboneros. Existía una taberna en cada parroquia; la de Vitiriz era también estanquillo y se encontraba en el lugar de Rocamador, la do Barreiro la llevaban en arriendo los vecinos. Funcionaban todo el año tres molinos harineros: uno estaba en el río Ares, en el término do Barreiro y los otros dos en el “rego de Santalla”, en el término en Vitiriz. Se especifica en el mismo catastro que en ninguna de estas feligresías había hospital alguno.
En la relación de los beneficios parroquiales contenida en el libro titulado Razón Universal de todas las piezas eclesiásticas de este obispado de Lugo. Año 1755, que se guarda en el Archivo Diocesano, figura en el arciprestazgo de Abeancos “San Juan de San Cibrao, con “Santa María de los Ángeles” y “Santa María de Roquemador”; esta última era de presentación del dueño del coto de “Hérmora”.
En 1828 Sebastián Miñano anotó en su Diccionario que “San Vicente de Vitiriz”, en la provincia y obispado de Santiago, era de la jurisdicción de Boente. Tenía por entonces 22 vecinos y 102 habitantes. Contribuía con 340 reales.
En 1850 Pascual Madoz dice que Vitiriz era de la diócesis de Lugo. Su iglesia era uno de los anejos de Santa María de los Ángeles de Boente. El término parroquial estaba atravesado por el camino de Melide a Arzúa, que al igual que el resto de los caminos locales estaba en malas condiciones. La industria era la agrícola y pecuaria. Había en la parroquia 45 casas que se repartían entre los lugares de “Baladás, Bimieiro, Pena Rocamador y Vitiriz”; la población total era de 45 vecinos y 76 almas.
En los años treinta del siglo XX Carré Aldao vuelve a repetir que Santa María de los Ángeles de Boente pertenecía al obispado de Lugo, arziprestazgo de Abeancos y tenía por filiales San Vicente de Vitiriz y San Xoán de San Cibrao. La parroquia de Vitiriz tenía en esos años 141 habitantes de hecho y 138 de derecho, que se albergaban en los 27 edificios que había en el término, 13 de un piso y 14 de dos pisos.
También en esta última década apuntaba Taboada Roca que junto a las iglesias de Vitiriz y de Santa María de Melide, hubo pequeñas casas destinadas a las ermitañas que cuidaban del mantenimiento de los templos, al tiempo que daban posada a los caminantes a cambio de recibir limosna.
Por entonces la iglesia de San Vicente de Vitiriz estaba a cargo de la Cofradía de Rocamador, integrada por la hermandad de clérigos de Abeancos, Toques, Santiso y Melide. Al parecer, los estatutos de la cofradía se remontaban al año 1692, teniendo por costumbre celebrar misa por los cofrades difuntos los jueves siguientes al día del Corpus.
En los años setenta del siglo XX figura en la Gran Enciclopedia Gallega que en el término parroquial de Vitiriz había 79 habitantes.
Han sido numerosos los estudiosos que han visto influencias del Camino en el topónimo de Rocamador, relacionando Vitiriz con el santuario francés de Sainte Marie de Rocamadour.
Fuentes y bibliografía
ARCHIVO GENERAL DE SIMANCAS, Dirección General de Rentas, Primera Remesa, Catastro de Ensenada, Respuestas Generales, Libro 243, fols. 371r-395v.
ARCHIVO HISTÓRICO NACIONAL, Clero-Secular_Regular, Libro 6286, fols. 2, 50.
BROZ REI, Xosé Manuel, A Terra de Melide, [Melide], Xosé Manuel Broz Rei, D.L. 2001.
BROZ REI, Xosé Manuel, Santispiritus de Melide, [Melide], Xosé Manuel Broz Rei, 2004.
CARRÉ ALDAO, Eugenio, Geografía General del Reino de Galicia: provincia de la Coruña, t. 2, Francisco Carreras Candi (dir.), Barcelona, Casa Editorial Alberto Martín, [s.f.].
CARRO GARCÍA, Xesús, CAMPS CAZORLA, Emilio, FERNÁNDEZ OXEA, Xosé Ramón, “Arqueoloxía relixiosa de Melide”, en Terra de Melide, [Santiago de] Compostela, Seminario de Estudos Galegos, 1933, pp. 251-322.
GARCÍA CONDE, Antonio, LÓPEZ VALCÁRCEL, Amador, “Episcopologio Lucense (X-1990)”, Liceo Franciscano, 43, 130-132 (1991), pp. 747-749 [Arciprestazgo de Abeancos].
INSTITUTO GALEGO DE ESTATÍSTICA, Información estatística por temas [en línea], disponible en http://www.ige.eu/web/index.jsp?idioma=gl [Consulta 19/09/2017].
INSTITUTO GEOGRÁFICO NACIONAL, Mapa topográfico nacional, escala 1:25.000. Hojas 96-I, 96-III (2001).
INSTITUTO NACIONAL DE ESTADÍSTICA, Nomenclátor: población del padrón continuo por unidad poblacional [en línea], disponible en http://www.ine.es/nomen2/index.do [Consulta 22/11/2020].
LÓPEZ, Atanasio, “Excursión a la villa de Arzúa y sus alrededores”, en Lino Gómez Canedo (ed.), Nuevos estudios crítico-históricos acerca de Galicia, t. 2, Santiago de Compostela, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Padre Sarmiento de Estudios Gallegos, 1947, pp. 286-294.
MADOZ, Pascual, voz “Vitiriz (San Vicente de)”, en Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar, t. 16 [Via – Zuzones], Madrid, Imprenta del Diccionario geográfico-estadístico-histórico de D. Pascual Madoz, 1850, p. 340.
MIÑANO, Sebastián de, voz “Vitiriz (San Vicente de)”, en Diccionario geográfico-estadístico de España y Portugal, vol. 10 [Villaviciosa – Zuzones], Madrid, Imprenta de Pierart-Peralta, 1828, p. 30.
TABOADA ROCA, Antón, “Notas Históricas”, en Terra de Melide, Compostela, Seminario de Estudos Galegos, 1933, pp. 135-250.
VOZ “Vitiriz, San Vicente de”, en Ramón Otero Pedrayo (dir.), Gran Enciclopedia Gallega, t. 30 (Vea – Zurita), Santiago de Compostela, Gijón, Silverio Cañada, 1974, p. 158.