Hospital que en el siglo XVI estaba abierto para pobres enfermos. Más tarde se rehabilitó para acoger a los niños huérfanos y desamparados. Estaba en la llamada rúa Tras de Salomé de la ciudad de Santiago de Compostela a espaldas de la iglesia que lleva ese mismo nombre, dentro de lo que fue el antiguo recinto amurallado de la ciudad.
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| Edificio en el que estuvo ubicado el antiguo hospital de Santa María Salomé o das Orfas |
Historia
Nos dice Barreiro Mallón, que en 1571 el visitador arzobispal informaba de que este hospital lo había donado “muchos años a una mujer viuda” y que estaba detrás de la iglesia de Santa María Salomé. En esa fecha era una pequeña casa de planta baja con dos aposentos para “pobres enfermos” que traían ellos mismos “la cama en la que duermen y lo que más an mester”. Por otra parte afirma Barreiro de Vázquez, que en el año 1589 este hospital carecía de rentas (aunque no consigna las fuentes de información).
En el año 1600 consta que el arzobispo compostelano Juan de San Clemente dejó en su testamento una cama con sus ropas para este hospital. Poco después, en 1607, el cardenal Jerónimo del Hoyo dice en sus Memorias de este establecimiento: “Hay otro hospital a la espalda de la iglesia parrochial de sancta María Salomé. No se halla del dotación ni memoria alguna, más de que se acojen allí siertas mugeres pobres y quando alguna muere el rector provee de otra. No tiene renta. Presúmese que algún deboto dexó la dicha casa para el dicho efecto y las mugeres pobres que viven en él solían barrer la iglesia. Tiene sobre la puerta una imagen de Nuestra Señora y una lámpara que de devoción se suele encender los sábados en las noches, en reverencia de Nuestra Señora. Este hospital se cayó todo una noche sin quedar sino las paredes y éstas desmoronadas, y el limosnero de su Ilustrísima, Maximiliano de Austria, mi señor, acabó de derribar las dichas paredes y en el sitio en donde estaba el dicho hospital, y algo más que tomó, hiço el hospital en la forma questá hoy, para que en él se recogiesen todos los muchachos y muchachas que de noche se quedaban por las calles desamparados y llorando; y en este hospital y en cosas que en el hiço gastó más de mil y trecientos ducados que dio a la dicha ermita Beatriz Abrito ermitaña della; y la paga Juan de Payo, escrivano, vecino de Bimianço. Pasó scriptura delante de Pedro Dias de Baldevieso, escribano desta ciudad. Tiene una vaca. Está adornada y tiene buenos caliçes y ornamentos”.
Dicen Barreiro y Rey que en el Archivo Diocesano de Compostela se guarda un legajo del año 1778 que contiene una encuesta que se hizo con el fin de obtener datos para la financiación de la “Casa de la Misericordia de Santiago”; el sistema contemplaba recabar fondos provenientes de obras pías y cofradías que no estuviesen cumpliendo con sus funciones. A tales efectos los hospitales compostelanos de la Troia, junto a los de Carretas y Salomé justificaron la cobertura de los objetivos de su fundación, ya que todavía recogían a pobres y enfermos y, por lo tanto, no podían desmantelarse en favor de otras instituciones de beneficencia sin causarles quebranto.
En 1880 el hospital de Salomé, que se nombraba también “hospitalillo de las Huérfanas”, continuaba en funcionamiento; el inmueble es descrito entonces por Fernández y Freire como una “pobre casita” que tenía la imagen de la Virgen del Portal en una hornacina sobre la entrada, y encima de hornacina una inscripción con una fecha: AÑO DE MDCXI; la fecha correspondería con la rehabilitación promovida por el arzobispo Maximiliano de Austria.
En 1887 el edificio del hospital fue demolido por el particular que lo adquirió entonces.
Fuentes y bibliografía
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