MASIDE, parroquia de San Pedro de
Feligresía del Camino Francés en el municipio de Sarria, provincia de Lugo. Está atravesada de este a oeste por el tramo directo del camino de Sarria a la parroquia de Belante por Santa Marta y Domiz. Se encuentra entre las parroquias de Santalla de Arxemil, al norte, San Martiño de Requeixo al nordeste, Nosa Señora do Rosario, San Salvador y Santa Mariña de Sarria, al este, Santiago de Farbán, al sudeste, Santiago de Barbadelo, al sur y Santa María de Ortoá, al oeste. Comprende doce entidades de población, una jacobea: Zanfoga; las que no son atravesadas por el Camino son: Carreiroá, Celeiro, O Currial, A Fonte, Outeiro, Requeixo, Río, O Romeo, San Vicente, Santo Estevo y A Vilerma.
De mediana altitud, sus arroyos pertenecen la cuenca fluvial del río Celeiro o río Pequeño, afluente del río Sarria.
Tenía ochenta y seis habitantes censados en 2019. La mayoría de la población está empleada en la agricultura.
Los días veintisiete y veintiocho de junio se celebra las fiestas del santo patrón.
Historia
La primera vez que encontramos mención referida a San Pedro de Maside es en el año 1106, cuando Ero Armentáriz y su mujer cambiaron al monasterio de Samos la cuarta parte de la iglesia de Sancto Petro de Masiti y otras propiedades por una heredad en Neira. Así mismo, consta que en el año 1107 Ermesinda Rodríguez donó al monasterio de Samos una parte en la iglesia de Sancto Petro de Masidi.
En el año 1125 el abad de Samos, Pedro Froilaz, realizó el inventario de todas las heredades acrecentadas al monasterio desde el comienzo de su prelancia; entre ellas figura en el territorio de Páramo la ecclesia de Sancto Petro de Masidi.
El lugar de “San Viçençio de Masyde”, sito en esta parroquia, aparece en el memorial de agravios que en 1475 confeccionó Álvaro González de Ribadeneira reclamando al conde de Lemos la posesión de algunas feligresías, cotos y lugares que según él le tenía ocupados. Sostenía entonces Álvaro González que dicho lugar era un tercio suyo por razón de que era de la iglesia de Maside y que él y sus antecesores siempre habían llevado un tercio de ese beneficio y que no embargaron los dos tercios con cura que eran de la presentación del conde de Lemos.
Ya en la Edad Moderna se especifica en el Catastro de Ensenada (1752) que la parroquia de San Pedro de Maside confrontaba por el levante con la feligresía de “San Salvador de Villar de Sarria”, por el poniente con la de Santa María de Ortoá, por el norte con “Santa Eulalia de Argemil” y por el sur con Santiago de Barbadelo. Era señorío particular de la señora condesa de Lemos, a quien pertenecía como marquesa de Sarria, y por otra parte señorío del monasterio de Samos, por lo que ambos percibían las rentas de fanegas y servicios en virtud de repartimiento que les estaba hecho; así mismo el monasterio disfrutaba del derecho de las luctuosas. El término jurisdiccional del monasterio dentro de esta parroquia dividía por el “puente del Aspera“, de donde seguía al peñasco de Penagache, de ahí a la iglesia parroquial, para terminar en el pontón del río Bao.
Por entonces los diezmos de lo que se producía en la parroquia los percibía el cura párroco, excepto una tercera parte que eran del monasterio de Samos; el mismo cura recibía también la mitad de los diezmos que correspondían a cuatro vecinos de Santa María de Ortoá. Los vecinos de Maside pagaban el derecho de primicia de la fábrica de la iglesia según tuvieran o no yunta de labranza y dependiendo también de los bienes que poseían. El derecho del “voto” que percibía el cabildo de la Santa Iglesia de Santiago de Compostela era de ferrado y medio de centeno al año por cada labrador.
En total estaban censados treinta vecinos. El único clérigo que moraba en la feligresía era el propio cura párroco. Se contaban cuarenta y siete casas, todas habitables. Había un estanquillo de tabaco y una taberna para el abasto de vino al por menor, que era del común de los cinco vecinos del lugar de Zanfoga que vivían en los términos de la jurisdicción de Samos, la cual llevaban alternativamente cada uno de ellos un año. Funcionaban la cuarta parte del año siete molinos harineros de agua corriente, uno de ellos dotado con dos ruedas y todos los demás con una sola. Además se explotaban diecinueve colmenas.
Tres años más tarde, en la relación de los beneficios parroquiales del obispado de Lugo, figura en el arciprestazgo de Sarria: San Pedro de Maside, con “Santa Eulalia de Argemil”, laical del conde de Lemos; contribuía con 4.400 reales.
En 1826 Sebastián Miñano anotó en su Diccionario que la feligresía de “Santiago de San Pedro de Maside”, en la provincia y obispado de Lugo, era de la jurisdicción de Moreda. Dice que tenía 191 habitantes repartidos en las aldeas de “Correal, Villerma, San Vicente, Zanfoga, Fonte y Carreiroa”.
Ya en el año 1848 dice Pascual Madoz que San Pedro de Maside era de la jurisdicción de Sarria. La iglesia parroquial era matriz de la de “Santa Eulalia de Argemil”, el curato de primer ascenso y el patronato lego. Comprendía por entonces los lugares y casales de “Carreiroá, Celeiro, Corrial, Fuente, Outeiro, Requeijo, Río, San Esteban, San Vicente, Veiga de Arriba, Villerma y Zanfoga”, que reunían cuarenta y dos casas de pobres labradores. Los caminos que atravesaban el término se encontraban en regular estado. Se producía centeno, trigo, lino, maíz, habichuelas y otras legumbres, patatas, nabos y castañas, algunas frutas y pastos; se criaba ganado vacuno, lanar y de cerda. La industria era la agrícola y la pecuaria, había molinos harineros y telares para el lino y lana. La población sumaba 968 almas.
Hasta el año 1890 esta parroquia comprendió dentro de sus términos algunos barrios del actual ensanche de Sarria (incluidos los de San Lázaro y de la Estación), que fueron segregados para ser incorporados a la parroquia de San Salvador de Sarria primero, y posteriormente a la de Nosa Señora do Rosario de Sarria.
En los años treinta del siglo XX, dice Amor Meilán que esta parroquia era de entrada, con los lugares de “Carreiroá, Celeiro, Currial, Fonte, Masid, Outeiro, Río, Requejo, San Esteban, San Vicente, Veiga, Villerma y Zanfoga”. Tenía por filial “Santa Eulalia de Argemil”.
En la década de los setenta de esta última centuria figura en la Gran Enciclopedia Gallega que había en el término 164 habitantes.
Fuentes y bibliografía
AMOR MEILÁN, Manuel, Geografía General del Reino de Galicia: provincia de Lugo, Francisco Carreras Candi (dir.), Barcelona, Casa Editorial Alberto Martín, [s.f.].
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