Municipio de la provincia de Lugo atravesado en su extremo norte por el Camino Francés. Limita al noroeste con el ayuntamiento de Palas de Rei, al noreste con el de Guntín, al este con el de Portomarín, al sureste con el de Taboada y al suroeste con el de Antas de Ulla.

Consta de veintiocho parroquias, a saber: Santa María de Arada, Santiago de Bidouredo, San Martiño de Cumbraos, San Martiño de Fente, San Cibrao dos Ferreiros, San Pedro de Frameán, San Martiño de Fufín, Santiago de Lavandelo, Santa María de Leborei, la jacobea Santiago de Ligonde, San Xoán de Lodoso, Santa María de Marzán, San Pedro de Milleirós, San Miguel de Esporiz, San Cristovo de Novelúa, Santa María de Pedraza, San Miguel de Penas, San Cibrao de Pol, Santa María de Salgueiros, San Salvador de San Breixo, Santa María do Bispo, Santa Eufemia de Satrexas, Santo André de Sirgal, Santa Mariña de Sucastro, Santa María de Tarrío, San Salvador de Valboa, San Pedro de Vilanova y San Cristovo de Viloíde.

Su superficie es de 114,6 km. cuadrados. Tenía 3.616 habitantes en 2019 y su densidad era entonces de 31,5 hab./km cuadrados.

La principal vía de comunicación es la carretera N-640 que une Lugo y Lalín; de menor importancia son las carreteras que enlazan Palas de Rei con Taboada (LU-221-LU-212) y Portomarín con Palas de Rei (C-535).

Caracteres ecológicos

Municipio emplazado en tierra de depresiones y de pequeñas sierras de mediana altitud. Comprende en el centro un gran bloque hundido que ocupa tres quintas partes del término y conforma la cabecera de cuenca fluvial del río Ulla. Al norte y al este se encuentra un sector marginal montañoso conformado por los montes de San Simón, la sierra de Ligonde y los montes de Vacaloura, donde se registran las cotas de máxima altitud que no superan los 750 metros; excepcionalmente el río Irixe, que discurre por la vertiente norte de la sierra de Ligonde, vierte sus aguas en la cuenca del río Miño.

Su clima es oceánico, de dominio sub-húmedo templado, si bien al estar distanciado del mar se ve influenciado por elementos continentales. Así pues, las precipitaciones medias anuales se establecen entorno a los 1.150 mm. Pese a estar repartidas con cierta homogeneidad, los meses invernales reciben la cantidad más elevada, registrándose en las estaciones intermedias proporciones de menor cuantía; en el estío las precipitaciones son más pequeñas que moderadas, soportando una manifiesta sequía en julio y en agosto. La temperatura media anual se encuentra entre 11 y 12º C; el mes más cálido posee una temperatura media de 17-18º C y el mes más frío ronda los 6º C de media.

Elementos humanos y económicos

La población se asienta en este municipio en pequeñas entidades concentradas y relativamente distanciadas unas de otras, que coexisten al lado de casales dispersos que se reparten entre las explotaciones agropecuarias. No obstante en los últimos tiempos la despoblación ha modificado el hábitat; es así que el número de habitantes ha descendido entre cuatro y cinco décimas partes desde los años cuarenta del siglo XX, siendo un factor de máxima relevancia el envejecimiento de la población, que se ha venido produciendo de forma progresiva hasta resultar que en 2016 las personas mayores de 65 años eran 1194, frente a las 339 que tenían menos de 15 años, quedando establecida la media de edad en 50,4 años y siendo muy superior el número de las defunciones al de los nacimientos con un saldo vegetativo negativo de menos 29. Los cambios en el hábitat también se manifiestan en la redistribución demográfica, ya que actualmente la mitad de la población vive en la cabecera municipal que ha sido foco de atracción y de absorción de los habitantes término, lo mismo que las principales vías de comunicación en cuyas márgenes se han creado nuevos asentamientos laxos y lineales.

Hasta los años sesenta del siglo XX hubo un modelo económico autosuficiente y cerrado, con un modo de vida muy distinto del actual. Las mejores tierras estaban destinadas a los cereales y a las patatas y se vendían las mejores cabezas de ganado en las ferias cercanas; la dieta alimenticia era invariable. No obstante, a partir de ese decenio esas condiciones evolucionaron: se pasó a una economía de mercado con una manifiesta línea de especialización. El ganado bovino adquirió mayor protagonismo, puesto que desde los años ochenta se ha doblado su número; si antes destacaba la rubia gallega para la producción de carne, ahora sobresale la frisona para obtener mayores ingresos con la venta de leche (el queso artesano de la Ulloa es Producto Gallego de Calidad). Las tierras labradas decrecieron sin intermisión algo más de ocho décimas partes desde comienzos de los años setenta; los antiguos trigales, centenales y patatales son ahora pastos y prados que suponen entre cuatro y cinco décimas partes de la superficie agraria total, llegando incluso a sustituir a las áreas de matorral. El ganado porcino descendió cerca de un cuarto desde comienzos de los años ochenta, mientras las aves de corral aumentaron de manera considerable septuplicándose en los años noventa. Las antiguas instalaciones para el resguardo del ganado y para guardar los aperos de labranza han sido abandonadas, construyéndose en su lugar modernas naves de estabulación. El número de explotaciones de ganado bovino en 2014 era de 203.

Con todo, la población dedicada a las actividades agrarias no llega en la actualidad ni a un cuarto del total. La empleada en el sector de la industria y de la construcción representa ser tres de cada diez ocupados, mientras que el sector de los servicios aglutina a la mayoritaria comprendiendo a algo menos de la mitad de los trabajadores, que se encuentran en su mayoría establecidos en la cabecera municipal. Así en el año 2016 se contaban 463 empresas: 57 dedicadas a la construcción, 35 a la industria y 203 al sector de los servicios, destacando en este último campo el incremento de los establecimientos turísticos, que han pasado de ser 2 en el año 2003 a ser 11 en el 2013. Con todo hay que hablar en realidad de microempresas, ya que en 2016 el número de las que tenían entre 0 y 2 asalariados eran 429, frente a 2 que tenían entre 20 y 49 asalariados y otras 2 entre 50 y 99 asalariados.

Fuentes y bibliografía

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